Wanting, waiting, needing...

The night porter (1974), Liliana Cavani

Charlotte Rampling & Dirk Bogarde
Una mujer judía que, durante la Segunda Guerra Mundial, siendo apenas una adolescente, estuvo en un campo de concentración, se reencuentra trece años después con el oficial nazi que solía abusar sexualmente de ella cuando estaba cautiva. Ambos coinciden en un lujoso hotel de Viena, donde él trabaja como portero. La dolorosa experiencia pasada desencadenará una relación sadomasoquista entre ellos.

No puedo dejar de empezar contando que Dirk Bogarde cuenta no sólo con el atributo obvio de ser una leyenda del cine sino que tambien es el actor favorito de mi amado Steven Patrick Morrissey.
En esta película, que ha pasado a ser un clásico del cine de todos los tiempos, se luce junto con Charlotte Rampling que no sólo esta jovencísima sino que se come toda la película con su actuación.
Además de la estética perturbadora y oscura, hay cierta escena más que controversial de este film que inspiro muchas otras producciones audiovisuales tan disimiles entre sí como un conocido y polemico video de Madonna (del que para mí es lejos el mejor tema de la mejor etapa de ella) hasta otro de la banda oriunda de Los Ángeles, Black Rebel Motorcycle Club.
De hecho, hay una anécdota que dice que Madonna personalmente habría llamado a Dirk para participar en dicho video y él, atravesando ya los últimos días de su vida, se negó.
Este film es altamente recomendable para gente con paciencia como para disfrutar el cine clásico de resolución y atmósferas diferentes del actual. No dejen de verla creo que muchas de las escenas figuran entre los momentos más logradamente perturbadores y memorables de dicho arte.

Por cuestiones de "violaciones de uso" la escena de la que les hablaba ha sido borrada de youtube, pero bueno, creo que la foto que puse es suficiente referencia para que puedan ver los siguiente videos que "homenajean" la película:

Madonna - Justify my love.



Black Rebel Motorcycle Club - Ain't no easy way.

Motow's daughters

Si, como amante del soul "vieja escuela" pasé años conformándome y avergonzándome de escuchar Alcia Keys o a lo sumo Joss Stone.
Por eso, agradezco eternamente la aparición de mi amada Amalia Casa De Vino que desató esta ola de muchachas que (algunas bien otras mal) reivindican el minivestido y el peinado batido con sus voces.

Les presento a mi nueva y rubia debilidad:

DUFFY

Last Days

Desde el momento en que empecé a apreciar de manera diferente las arte cinematográficas, Gus Vant Sant se convirtió en un director casi clisé en mi existencia. Según leí hoy en “el gran diario argentino” sus películas casi siempre tratan la incomunicación como tema principal, lo cuál me dio un motivo para pensar que mi afición por dicho realizador no sea nada casual dada la carrera que sigo.

Mientras su última película “Paranoid park” espera por mi en algunas salas de centro me dispuse a mirar “Last days”, film supuestamente inspirado en los últimos días de Kurt Cobain.

Lamentablemente debo decir que es, por lejos, la película que menos me gustó de él. La carencia de una historia soluble sumada a la lentitud del desarrollo de las escenas llevan a que, por momentos demasiado prolongados, la película se vuelva insoportable.

Los diálogos son insostenibles y carecen de coherencia con la pobre trama que intenta sostenerse sobre la posible figura del mito sin querer ser una biopic pero no logra siquiera la pretensión de crear una atmósfera sórdida.

El único momento que rescato, como es de esperarse en mí es la (casi diría que infaltable en todo trabajo del director) escena se sexo –en rigor no llega a serlo pero lo intenta- entre el protagonista y otro muchacho. Cualquiera que haya visto una película del director habrá podido notar que las escenas de sexo siempre tiene algún toque característico, técnicamente hablando: un encuadre particular, o una iluminación distinta etc que le da un poco de aire a la estructura del relato y a la apretada tarea de presentar una recreación de la intimidad y esta no es la excepción aunque no sea tan explicito como en sus otros trabajos.

Calificación: 2 Veritos rubies